Una vez más...

...volví al barrio. Al barrio del que nunca sentí haberme ido.

Al barrio que conocí con adoquines y al que le vi nacer su asfalto negro mientras jugábamos en la vereda a hacer barquitos con tapitas de gaseosa y seguirlos hasta la esquina donde desaparecían en la boca de tormenta.

Al barrio donde jugando en la vereda le rompimos el vidrio de la ventana al vecino.

Al barrio que era 100% barrio. Y que cambió mucho.

Cambió ese mercado abandonado por un canal de televisión.

Cambió ese Mercado de Pulgas lleno de baratijas por uno "más moderno" lleno de baratijas a precio dolar.

Cambió la plaza abierta por una con rejas. Muy Pro.

(....)

Paré en mi cuadra para ir al Kiosco, compré y volví al auto. Arranqué mirando a alguien que bajaba del auto que había estacionado recién. 

No dejé de mirarlo hasta que lo vi que se acercaba a su puerta, a la que lo había ido a buscar tantas veces para ir a jugar a la pelota.

Lo llamé por su nombre y nos reconocimos y nos dimos un abrazo grande.

Nos quedamos un rato hablando de nuestras vidas, de aquella y de ésta.

Después me fui. Otra vez. 

Me traje un recuerdo más. 

Y me queda la sensación de que cada día que pasa mi barrio está más lejos.

Como extraño mi barrio.